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El Infiniti M35h es la tercera versión de la arquitectura M, que llegó el pasado año al mercado como, también tercera generación, aunque en Europa era hasta ahora un modelo desconocido. El M era habitual del mercado estadounidense, que fue el primer objetivo y la razón de la creación de la marca de lujo de Nissan.
El diseño de esta berlina revela enseguida la identidad de la marca, con un frontal ancho y visualmente potente, una silueta fluida que nos desvela su generosa longitud de 5 metros y una trasera recogida que engaña sobre las proporciones reales del coche.
En el interior se aprecia una combinación de modernidad, sobriedad y acabados de alto nivel, a base de la utilización de materiales de gran calidad. El diseño del tablero de a bordo, en forma de uve concentra en la parte central la mayor parte de los controles de gobierno del coche y de los sistemas multimedia, acondicionamiento y de navegación.
El M35h ha sido desarrollado con la tecnologÃa hÃbrida gasolina/eléctrica de Infiniti que se presentó por primera vez, como tantos otros aspectos del M, en el concept Essence de 2009, hoy conocida bajo la denominación Infiniti Direct Response Hybrid.
El núcleo de esta berlina hÃbrida es una arquitectura mecánica formada por motor delantero y tracción trasera basada en un esquema de propulsión gobernado por dos embragues.
Es un hÃbrido con motor térmico de seis cilindros en uve y un motor eléctrico capaz de trabajar en serie o en modo paralelo, lo que permite utilizar el coche con electricidad o con gasolina, únicamente, o combinando ambos sistemas energéticos.
El primer embrague (en seco y electrónico) está instalado entre el motor V6 de 3,5 litros atmosférico y el motor eléctrico. Su función es la de facilitar el desacoplado del motor de gasolina cuando el coche funciona en modo eléctrico o en modo de regeneración de energÃa.
El desacoplado del V6 reduce de forma significativa las pérdidas mecánicas y conlleva un aumento de la eficiencia del motor eléctrico.
El segundo embrague (bañado en aceite) está situado al otro lado del motor eléctrico, dentro del conjunto de la transmisión y su función es la de sustituir a un convertidor de par tradicional y convertir la caja de cambios de siete velocidades en una caja manual automatizada con un ahorro final de consumo de un 10 % en comparación con un convertidor de par convencional.
El motor eléctrico tiene una potencia de 50 kW (68 CV), con un par de 270 Nm a 1.000 rpm, y puede ser el propulsor, en solitario o en combinación con el motor térmico, o realizar la función de generador de energÃa para cargar la baterÃa de forma convencional o recuperando en las fases de frenada y desaceleración.
El motor de gasolina es un viejo conocido de la marca. Se trata del 3.5 de 306 caballos de potencia y 350 Nm, una cifra de par elevada que ha sido el motivo de su elección para ser combinado con el propulsor eléctrico.
En este V6 es caracterÃstica su alta capacidad para la aceleración. Es la nota deportiva que caracteriza a los modelos de Infiniti que montan este propulsor, aunque con algo más de potencia que en la configuración hÃbrida.
Y si a él se suma un eléctrico también con elevado par, la combinación es explosiva. Tenemos entonces un coche que sobre el papel es más rápido que el Panamera hÃbrido, pero no más eficiente, porque el Porsche gana ampliamente en este terreno.
Las cifras de consumo del Porsche en condiciones reales son muy cercanas a las oficiales de homologación, mientras la de este M35h se alejan de la tabla oficial.
Siendo asÃ, el balance, no obstante, es en este apartado positivo para el primer hÃbrido de Infiniti, teniendo en cuenta sus prestaciones deportivas derivadas de un enérgico sistema de propulsión que combinado proporciona 364 caballos de potencia.
La tecnologÃa hÃbrida de Infiniti consume y genera las emisiones de gases de un coche más pequeño y menos potente, como conclusión principal.
Una particularidad de este sistema, al igual que el de Porsche y el de Audi, es que la gestión hÃbrida no se circunscribe únicamente a crear ventajas en la utilización urbana del vehÃculo, porque también es capaz en carretera, con una gestión muy afinada de la utilización del motor eléctrico y de las posibilidades de planeo o navegación a vela, sin resistencia mecánica o, simplemente, reducida al máximo.
Infiniti asegura que el M35h está capacitado para rodar sólo en modo eléctrico hasta un 50 % del tiempo en una ruta mixta que incluya carreteras y vÃas urbanas.
En la prueba no se ha llegado a este porcentaje pero ha estado muy próximo, lo que indudablemente genera importantes ahorros en un coche tan pesado y potente.
A bordo del M35h es difÃcil percibir cuándo funciona un sólo sistema de propulsión o lo hacen los dos. Par tener el apunte es mejor seguir el estado del sistema en la pantalla de datos del salpicadero, en el que se aprecia de forma muy clara como fluyen las transferencias de energÃa.
El tacto de uso de este hÃbrido es de infinita suavidad, aunque a muy baja velocidad pueden producirse algunos tirones. Hay que ser cuidadoso con las frenadas y las aceleraciones para evitarlos. En este campo, el sistema del Panamera gestiona mejor las transiciones de la transmisión.
En la ciudad, el Infiniti M35h no es la mejor opción. Su longitud y elevado peso limitan la dinámica urbana del coche, aunque es ventajoso en términos económicos, porque es en estos escenarios en los que mejor se comporta el sistema hÃbrido y donde mayores ventajas proporciona.
El Infiniti es un coche más adecuado para carretera abierta. El chasis tiene ciertas cualidades deportivas y con la propulsión trasera las sensaciones son algo diferentes a las que transmiten los modernos de tracción delantera.
No obstante, no hay que temer un descuadre de la parte trasera, salvo en situaciones lÃmite, porque las ayudas electrónicas son abundantes y sin ser demasiado invasivas neutralizan cualquier error de acelerador del conductor.
Para obtener el mejor rendimiento del sistema hÃbrido, el M35h impone un estilo de conducción suave, con salidas de acelerador progresivas.
Si las puestas en marcha se hacen con brusquedad, el motor térmico predominará con el incremento de consumo equivalente. Y si son suaves podremos obtener a cambio algún kilómetro extra de uso eléctrico con nulo gasto de carburante y cero emisiones.
El Infiniti M35h se sitúa en términos de rendimiento en un campo similar al de la competencia, por lo que la elección de compra puede estar determinada los deseos de distinguirse del resto del mercado.
La versión probada corresponde al acabado de mayor nivel de la gama, por el que hay que pagar un suplemento de más de 6.000 euros, que incluyen un amplio abanico de nuevas tecnologÃa de asistencia a la conducción como el aviso de intervención del ángulo muerto, el control de crucero inteligente con seguimiento de baja velocidad, el aviso de colisión en avance, y el aviso y prevención de lÃnea de salida del carril.
El equipamiento añadido del Premium suma el Eco Pedal, el climatizador de Aire del Bosque (Forest AirTM) (opcional en el GT), el sistema de navegación con disco duro de 30 gigabytes con alta resolución e información de la Guia MichelÃn (opcional en el GT) y los 16 altavoces Bose con sistema Premium de sonido de música (opcional en el GT).
De este Infiniti puede decirse que tiene su único competidor, por tecnologÃa, en el Panamera, aunque también le disputan espacio los hÃbridos de BMW y Mercedes, dotados de tecnologÃas diferentes pero igualmente efectivas. Y precio es similar y hace difÃcil la elección.
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