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Desde aquel primer Prius que aterrizara en Canarias hace ya casi diez años, la percepción del conductor canario respecto a los hÃbridos ha cambiado de forma progresiva. A la labor propia de la marca, algo habrá sumado la particular que desde aquà hemos ido aportando sobre una tecnologÃa en la que hemos creÃdo desde un principio y sin condiciones. El tiempo nos ha dado la razón y hoy en dÃa nadie duda de la eficacia del sistema Hybrid Synergy Drive de Toyota.
Si bien es cierto que los avances experimentados por los motores de combustión han reducido sensiblemente las diferencias de consumos en algunas situaciones, la realidad es que en un uso convencional y para la mayorÃa de conductores, un hÃbrido como los de Toyota sigue aportando unas ventajas incuestionables. En el caso del Yaris HSD, todo tiene algo más de sentido. Los resultados del Prius y del Auris HSD arrojan un mejor rendimiento en uso urbano, precisamente donde el Yaris debe jugar su mejor papel pues milita en la categorÃa de utilitarios (segmento B, perdón, que a las marcas ya no les gusta esas descripciones arcaicas).
¿Logrará el Yaris HSD mejorar los registros de consumo obtenidos por el Prius y Auris, especialmente en ciclo urbano? Lo desvelamos, aunque empezaremos por el tramo de carretera.
Empezamos aclarando que hemos querido calcar en la medida de lo posible los recorridos anteriores y en cualquiera de los tres casos (montaña, autopista y ciudad), aunque la exactitud no puede darse por motivos obvios. Además, en esta ocasión hemos hecho un cambio en dos de las mediciones: los recorridos de montaña y autopista han contado con dos pasajeros a bordo, su equipaje (25 kg) y un condicionante muy importante, como ha sido una temperatura exterior muy por encima de los 30 grados centÃgrados. Es decir, casi las peores condiciones posibles. Pero lo hemos querido hacer asà -la parte de los ocupantes, la climatológica ha sido circunstancial- por entender que un viaje de este tipo incluye compañÃa en promedio.
Dicho y hecho; partimos desde nuestro punto habitual (La Laguna) hacia el Parador Nacional del Teide. Con un calor asfixiante, lo primero que hicimos tras el reseteo de todas las cifras del ordenador de a bordo fue poner el climatizador en una cómoda temperatura de 21 grados. Escogimos además el modo de conducción "ECO", pues esta prueba se basa en practicar una conducción económico dentro de unos parámetros normales y admisibles por cualquier tipo de conductor. Es decir, no Ãbamos a ir desbocados por ningún punto, ni tampoco a "paso de tortuga". La subida al Teide por la carretera general la afrontamos con una idea de promedio de 50 km/h, una cifra que nos permitÃa abordar las curvas a unos 40 km/h y las rectas a unos 60 km/h. No nos adelantó ningún vehÃculo y en cambio, sà que nos vimos obligados a adelantar a dos, por lo que nuestro ritmo fue relativamente adecuado a la vÃa.
El primer tramo, los primeros 25 kilómetros más o menos, son los más duros. El consumo aquà debÃa ser elevado, pero la segunda mitad del ascenso es más suave y deberÃa bajar la cifra media en 1 o 2 litros. Y asà fue, como era lógico. Aunque el ordenador llegó a sobrepasar ligeramente los nueve litros de consumo medio, a la llegada al parador nacional se quedó en unos modestos 7,1 litros.
Aquà obtuvimos el primer dato importante del dÃa. El Auris HSD marcó el pasado año y en esta posición, en condiciones similares pero de menor calor y sin 30 kg de carga ¡la misma cifra!
Ahora restaba el tramo de bajada, ese en el que el consumo prácticamente es de cero. Únicamente en algunos tramos iniciales de fuertes subidas se arrancaba el motor de gasolina, pues el resto del tiempo éste permanecÃa apagado. En zonas de llaneo era bastante con "apuntar" al acelerador para que el motor eléctrico gastara un poco de la energÃa almacenada durante el descenso. En esos momentos en los que ves la carga de baterÃa al 100% y se sigue en situación de carga, piensas en la necesidad de baterÃas más capaces... ¡qué desperdicio! Hay que ver lo que cambia la percepción de la conducción en un coche de estos... Vas imaginando cuánta energÃa desperdician el resto de coches "normales" durante la bajada...
Finalmente, tras 125,5 kilómetros de recorrido, quedaba por conocer el dato final de consumo. Éste se quedó en 4,6 litros a los 100 kms, 1 décima menos que el Auris y a dos décimas del Prius. Una interpretación de escenarios nos indica que el Yaris HSD podrÃa al menos haber igualado el consumo del Prius si fuera invierno y viajáramos con sólo el conductor.
¿Valoración? Un aprobado en este parcial, sin duda. En términos económicos, al precio actual de la gasolina de 98 octanos situado en unos 1,15 euros (en Canarias), hubiéramos subido dos personas al Teide y vuelto a bajar por aproximadamente 6,63 € ¡poco más de 3 € por persona!
No te pierdas los próximos artÃculos sobre el consumo obtenido por el Yaris HSD en autopista y en ciudad. ¡Te sorprenderemos!
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