Es, tal y como reconoce la marca, un ordenador con ruedas por la conectividad, ayudas a la conducción y tecnologÃa a bordo que monta de serie y que se puede mejorar aún más en la lista de opcionales.
Si se compara con la generación anterior tiene un sobre coste medio de mil euros, pero como ha destacado hoy la marca en la presentación del nuevo modelo, el equipamiento de serie es mayor.
Para el mercado español sale de fábrica con asientos calefactados delanteros, paquete de aparcamiento con cámara trasera, cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas, sistema de infoentretenimiento MBUX con navegación premium de 11,9 pulgadas, control de ángulo muerto, asistente activo de cambio de carril, climatizador automático, volante deportivo multifunción, radio digital, apoyo lumbar con cuatro vÃas de ajuste o carga inalámbrica para dispositivos móviles.
También forma parte del equipamiento de serie los faros de led Highperformance, las luces de carretera automáticas, el paquete de iluminación interior (con 66 combinaciones de color), el paquete de integración para el teléfono y el escáner de huella dactilar (el vehÃculo nos reconoce y le aplica los ajustes que le hayamos programados como la posición de asiento y volante, o la iluminación ambiental. También es posible hacerlo a través de la voz o de un pin para proteger nuestros datos).
El tamaño de las pantallas del cuadro de relojes y del sistema de infoentretenimiento ya da una pista, nada más entrar por la puerta del conductor, de los avances tecnológicos que incorpora el Mercedes-Benz Clase C del que la marca asegura que representa la zona de confort de todo conductor.
Si las completamos con la realidad aumentada para la navegación (opcional), el coche nos proyecta la información más relevante en el parabrisas hasta 600 metros. A través de unas flechas dinámicas nos recuerda hacia que dirección debemos de girar para seguir la ruta recomendada.
Además en el sistema de infoentretenimiento las cámaras del coche nos proyectan imágenes de la dirección adecuada o de lo que sucede a nuestro alrededor en una intersección.
Otro elemento destacable opcional son los faros delanteros digital light (tienen 1,3 millones de pixel en cada uno), que iluminan con más intensidad y nos advierten de una obra de acondicionamiento de una carretera, de que hay una máquina trabajando o de si entramos en una zona prohibida a la circulación.
Y todo esto lo puede consultar el conductor desde una posición muy ergonómica en la que todo le queda a mano. Además cuenta con el asistente "Hey Mercedes" para que con instrucciones vocales podamos manejar la mayorÃa de las funciones.
Tanto él como el pasaje disfrutan ahora de un espacio mayor, pero que está más orientado a cuatro personas que a cinco, ya que el túnel central y la posición reclinada de los asientos traseros (para evitar dar con la cabeza en el techo, que tiene una caÃda más pronunciada y deportiva) limitan el acomodo de un quinto. Esto a pesar de que esta berlina (también disponible con carrocerÃa familiar "Estate") ha crecido 6,5 centÃmetros en longitud (hasta 4,75 metros) y uno en anchura (1,81 metros), pero ha perdido nueve centÃmetros en altura (hasta 1,43 metros).
El maletero que ofrece es igual que antes, de 455 litros. En el Estate sà es 30 litros superior, hasta 460 litros.
En las versiones hÃbridas enchufables (de 200 a 258 CV), que llegarán en septiembre, sà que se pierde algo de maletero, que la marca no ha cuantificado porque se está en la homologación final. Lo mismo sucede con la autonomÃa en modo 100 % eléctrico que dicen rondará los 100 kilómetros.
Entretanto, el nuevo Mercedes-Benz ya se puede reservar, desde 45.400 euros, con motorizaciones de hibridación ligera de 48 V de gasolina (de 170, 204 y 258 CV) y diésel de 200 y 265 CV).
|