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En la presentación estática del modelo este jueves, la filial española de la marca coreana ha explicado que están fijando los precios y los equipamientos con los que se comercializará la nueva generación de este SUV de cuatro puertas, que ha crecido en tamaño: mide 4,51 metros de largo (30 milímetros más que antes), 1,64 metros de alto (10 milímetros más) y 1,86 metros de ancho (10 milímetros más), con una batalla de 2,68 metros (10 milímetros).

Este aumento de proporciones ha sido posible porque para su fabricación se emplea la nueva plataforma N3, que además ha permitido dotar al vehículo de mayor tecnología y seguridad que en su predecesor.

Inicialmente se comercializará con los motores de gasolina 1.6 TGDi de 150 CV (con hibridación ligera y cambio manual inteligente iMT) y de 180 CV (también con hibridación MHEV y cambio automático DCT), los diésel 1.6 CRDi de 115 CV y 136 CV (con MHEV y cambio iMT o DCT), y el híbrido puro (HEV) 1.6 TGDi de 230 CV.

Unos dos meses más tarde se completará la gama de motores con la versión híbrida enchufable (PHEV) de 265 CV, cuya autonomía en modo 100 % eléctrico está pendiente de homologación.

El Kia Sportage se lanzó para el mercado coreano en junio de este año y es diferente (especialmente en el diseño del pilar trasero C y del paragolpes de la zaga) del que llegará a Europa.

El del Viejo Continente destaca por un diseño más deportivo, que desde la marca califican de "atrevido" y con el objetivo de hacer un producto diferente en un segmento del mercado, el de los C-SUV, muy competido.

Destaca la amplia parrilla delantera, que queda separada en dos partes por la zona que acoge la matrícula, y que en los laterales aloja las luces diurnas (en forma de bumerán) y los faros.

El capó caído, los pasos de rueda en negro (que es el mismo color en el que va rematado el techo), las taloneras laterales y las protecciones de los bajos (tanto delante como detrás) le dan una imagen musculada y deportiva típica de los SUV.

En el interior también se da un importante salto de calidad, ya que -desde el segundo de los acabados- la filial española quiere que el Sportage equipe de serie cuadro de instrumentos digital (de 12,5 pulgadas) y pantalla central para el sistema de infoentretenimiento de la misma medida.

Su diseño es curvado y visualmente parecen estar unidas ambas pantallas. También destaca el espacio interior tanto para los pasajeros delanteros como para los traseros, que dispondrán de un maletero de 591 litros (78 litros más que antes).

Según la marca, en las versiones híbridas la batería (situada bajo los asientos traseros) no resta casi espacio al maletero. En la híbrida enchufable no sucede lo mismo (no han podido cuantificar cuanto le resta la batería, que está situada entre los dos ejes).

Kia quiere que el Sportage sea uno de los todocaminos del segmento más seguros, para lo que va a sumar las ayudas a la conducción más importantes en el paquete DriveWise de serie.

En materia de conectividad el vehículo podrá recibir actualizaciones a distancia sin pasar por el concesionario, equipar los servicios Kia Connect y hasta tres puertos de recarga USB de tipo C (dos en la parte delantera).

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